Un violento ataque golpeó las instalaciones del medio RCN en Cali el domingo, cuando una granada explotó en la entrada del edificio, causando daños materiales y rompiendo ventanas de viviendas cercanas. Según la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), con sede en Bogotá, la explosión ocurrió aproximadamente 30 minutos después de que el último trabajador de RCN hubiera salido del lugar, y no se reportaron heridos.
El incidente ocurrió después de un intento previo el sábado por la noche, cuando una persona no identificada en motocicleta lanzó otra granada en la misma entrada. Ese artefacto no logró detonar, informó la FLIP.
RCN, uno de los principales medios privados de Colombia, había publicado recientemente un reportaje sobre operativos policiales y militares contra grupos armados ilegales en Cali y sus alrededores. Las autoridades también reportaron un ataque con explosivos separado la noche del sábado contra una estación de policía en Cali, que dejó cuatro personas heridas, entre ellas dos agentes.
El alcalde de Cali, Alejandro Éder, condenó el atentado como una respuesta “cobarde” a las medidas de seguridad reforzadas en la ciudad. El secretario de Seguridad, Jairo García, anunció una recompensa de 400 millones de pesos (106.666 dólares) por información que permita dar con los responsables.
En un comunicado público, RCN denunció el ataque como un intento de intimidar tanto a periodistas como a la ciudadanía, y pidió a las autoridades que garanticen la protección de la libertad de prensa.
En Free Press Alliance, condenamos el ataque en los términos más enérgicos. Los actos de violencia contra medios de comunicación representan un ataque directo a la libertad de prensa y un intento de silenciar el flujo de información independiente. Instamos a las autoridades a asegurar una investigación exhaustiva y a garantizar la seguridad de periodistas y trabajadores de medios en Cali y en toda Colombia.